sábado, 16 de julio de 2011

Unidad con Dios

Centro de Cristianismo Práctico
Servicio Devocional 11 julio 2011
Por el Rev. Roberto Sánchez



“Se celebraba en Jerusalén la fiestas de la dedicación.... El Padre y yo uno somos.” (Juan 10:22-30)

1.Charles Fillmore dice: “La realización suprema del hombre es su unión con Dios.

2.Y en la clase de Jesucristo Sana decíamos que la palabra realización significa “ser-uno-con”.

3.“Hay dos maneras de obtener comprensión. Una es seguir la guía del Espíritu que mora en nosotros, y la otra es avanzar ciegamente y aprender por medio de experiencias duras.” (LPR p.39)

4.La comprensión intelectual precede a la comprensión espiritual. Sabemos que Juan el Bautista simboliza el intelecto iluminado. Es esa fase de la mente que reconoce el Cristo y “prepara el camino para su manifestación en la conciencia.”



5.En el mensaje del pasado domingo nos referimos a esto mismo cuando leímos la cita de Job: “Ciertamente espíritu hay en el hombre, y el soplo del Omnipotente lo hace que entienda.” (Job 32:8)

6.Esta cita nos reafirma que cuando el Espíritu aviva la facultad de la comprensión entendemos que la meta del hombre es lograr unidad con Dios.

7.Cualquier otra meta es de naturaleza secundaria. Esto es una profunda realización, y comprensión espiritual.

8.La causa principal de la separación entre el hombre y Dios es la desobediencia. Y para restablecer la unidad con Dios tenemos que ser obedientes no solo en acto, sino en espíritu y en Verdad.

9.Esto significa que debe de haber una unidad en cada uno de nosotros de pensamiento- palabra- y- acción.

10.Desde que Adán y Eva desobedecieron las instrucciones de Dios se generó una separación en la conciencia de ambos de la conciencia de Dios.

11.La muerte es el resultado de vivir en una conciencia de separación de Dios.

12.Todo el Antiguo Testamento nos relata la lucha del hombre por establecer un verdadero pacto de unidad en conciencia con Dios.

13.A través del estudio del AT encontramos un Dios allá afuera interactuando con el hombre. Así fue con los Patriarcas, Moisés, Josué, Salomón, David y los Profetas.

14.Por ejemplo, cuando leemos Los Salmos, generalmente son cánticos o poemas dirigidos a un Dios separado del hombre.

15.Y todavía nos encontramos lidiando con este sentimiento de separación, tan prevaleciente en el AT. Le cantamos a un Dios allá afuera, oramos a un Dios distante, extendemos las manos hacia las arriba pidiendo ayuda y compasión a un Dios en las alturas.

16.Todavía nos encontramos tratando con un Dios allá afuera. Todavía nos encontramos luchando con sentimientos de soledad, abandono, depresión, inseguridad, y de insuficiencia, entre otros.

17.Ahora bien, de la misma manera que la desobediencia nos separa de Dios, podemos volver a Dios restaurando nuestra obediencia a Su voluntad divina en cada uno de nosotros.

18.A medida que vamos adquiriendo mayor comprensión de la naturaleza de Dios nos damos cuenta que Dios no es algo allá afuera con lo que tenemos que tratar; sino que Dios es una experiencia de vida interna que nos toca expresar; es algo para vivir y como dice Pablo, “en él vivimos nos movemos y somos”.

19.En nuestra realización de unidad con Dios nos damos cuenta de que Dios no nos da nada, porque ya nos lo ha dado todo.

20.Y eso que aparentemente carecemos viene como resultado de no expresar cabalmente la plenitud que es Dios en nosotros. Esa Toda-Suficiencia- en-todas-las-cosas.

21.En nuestra búsqueda de unidad con Dios, la comprensión nos ayuda a entender que tenemos que mover el punto de enfoque de afuera hacia adentro. El punto de unidad de Dios y el hombre se encuentra en el centro de su propio ser.

22.Y este nuevo camino se comienza dando un paso a la vez, y manteniendo el enfoque en las profundidades de nuestro propio ser. La oración, la meditación y el silencio son los métodos clásicos mediante los cuales vamos avanzando a una mayor unidad con Dios.

23.El llamado a la “unidad” es un llamado universal. Todo comienzo tiene lugar dentro de nosotros. Tenemos un llamado a lograr unidad e integridad en mente cuerpo y asuntos.

24.Le sigue el llamamiento a la unidad familiar. La familia es el núcleo central de la sociedad.

25.Los mayores y mejores líderes del mundo siempre han llamado a la unidad de los pueblos. La Guerra Civil en los Estados Unidos fue un esfuerzo brutal por mantener la unidad de la nación.

26.Pero “Ciertamente espíritu hay en el hombre, y el soplo del Omnipotente lo hace que entienda” que es necesario que el hombre realice su unidad con el Espíritu.

27.Y la recompensa a los que logran plena unidad espiritual con Dios es la vida eterna; y saber esto es comprensión intelectual. Cuando cada átomo, molécula, células, fibras y tejidos de tu ser sientan el llamado a la unidad y logren esa realización (ser-uno-con) espiritual entonces todo tu ser se llenará de luz con comprensión espiritual.

28.Y la pregunta es: ¿cómo puedo yo realizar mi unidad con Dios?

29.Comenzamos como hemos dicho anteriormente; con la oración la meditación y el silencio. El camino se presenta ante nosotros como “un ábrete sésamo”; y entrando a esas profundidades inexploradas logramos cada vez más unificarnos concientemente con Dios.

30.Cuando entramos en este reino de la comprensión de la Verdad encontramos el Silencio.

31.En el Silencio ocurre la unificación o unión con la conciencia de Dios. El Silencio es más que ausencia de sonido. Es un estado de conciencia en donde el alma puede escuchar un ‘silbo apacible y delicado. (1 R. 19:12). Fillmore dice “esa voz que no es voz”.

32.En el Silencio “escuchamos lo que Dios tiene que decir.” (LPR p. 214) Este es el primer paso, comunión con Dios, meditando en la Verdad, comprensión espiritual. Utilizamos afirmaciones “Yo Soy” para unificarnos con Dios y con la norma divina.

33.El segundo paso y más importante aún es la expresión de la Verdad a través del amor, viviendo la vida que nos toca vivir.

34.Si queremos crecer tenemos que vivir todo el mensaje que se nos da en el Silencio.

35.“Es la obediencia a ese Ser, no importa el mandato, lo que nos prepara para recibir más altos mensajes; lo que nos fortalece para mayores esfuerzos.” (LOE p. 102)

36.Cuando Jesús le dijo a Sus discípulos: “Un nuevo mandamiento os doy: Que os améis unos a otros; como yo os he amado” eso fue un llamado a la unidad.

37.Los empresarios, líderes políticos, personas de grandes éxitos han sido promotores de una u otra forma de la unidad entre los hombres.

38.Por ejemplo: esta nueva comunidad espiritual debe mantenerse unida en amor amistad y en Verdad. Solo así podrá crecer firme en el Señor.

39.En la Escrituras encontramos que dentro de la misma fe judaica existían movimientos separatistas, basados en creencias religiosas tale como los fariseos y saduceos.

40.Jesús lidio con estos grupos manteniéndose fiel a la norma divina, en cumplimiento y realización de Su unidad con Dios. ¿Pueden ustedes imaginar lo que hubiese ocurrido si Jesús hubiese modificado Su evangelio según los criterios y las normas dictadas por los fariseos y saduceos o por el Sanedrín?

41.Cada persona tiene libertad para vivir su vida como lo desee, no como otra persona quisiera que la viva.

42.A ti y a mí nos toca hacernos un examen de conciencia y preguntarnos si vamos a continuar sirviendo a la norma humana o vamos a comenzar a cumplir con la norma divina.

43.Y tuyo es el privilegio de elegir.

44.Dios te bendice ahora y siempre.

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