El momento presente,
Con la atención centrada en el momento presente, reclamo mi poder.
Cuando cuestiono o me preocupo acerca de algo, quizás esté enfocando mi atención en el pasado o proyectándola hacia el futuro. Mas hacerlo me roba el poder del momento presente. De modo que decido fijar mi intención en el ahora.
Aquieto mi mente y estoy consciente de todo lo que este momento tiene para ofrecerme. Toda la sabiduría que necesito está aquí ahora. Mis pensamientos pueden divagar hacia el pasado o el futuro, mas no permanezco allí. En vez de ello, elijo acoger el momento presente y avivar la sabiduría divina en mí. En el aquí y el ahora, encuentro las respuestas que busco. Mis decisiones son cabales y consideradas. Reclamo y acepto mi poder aquí y ahora.
En tiempo aceptable te he oído, y en día de salvación te he socorrido.—2 Corintios 6:2
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