Autenticidad
Soy una expresión perfecta de lo Divino tal y como soy.
Al mirarme en el espejo, el reflejo que veo es el rostro de Dios. Soy una de las billones de expresiones del único Poder. El haber sido creado incluye dones, talentos y experiencias únicas para mí. Al saber esto, ¿cómo puedo cuestionar el diseño del Creador?
Hoy abandono la ilusión de querer ser otra persona. Cualquier cualidad admirable que aprecie en los demás ya es parte de mí. Mi trabajo hoy es ser lo mejor que pueda. Aplico mi sabiduría para tomar decisiones saludables y pacíficas. Con un corazón abierto, comparto mi don del amor. No quiero ser nadie más, ya que soy una expresión perfecta de lo Divino, tal y como soy.
Te alabaré, porque formidables y maravillosas son tus obras.—Salmo 139:14
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