sábado, 15 de diciembre de 2012

Regocíjate por las Buenas Nuevas


Por Rev. Roberto Sánchez

“«El Espíritu del Señor está sobre mí, por cuanto me ha ungido para dar buenas nuevas a los pobres; me ha enviado a sanar a los quebrantados de corazón, a pregonar libertad a los cautivos y vista a los ciegos, a poner en libertad a los oprimidos y a predicar el año agradable del Señor.»” (Lucas 4:18-19)      

Cuando comencé a buscar una cita que armonizara con el título del mensaje de hoy me encontré con ésta.  El relato bíblico nos dice que estando Jesús en Nazaret entró en una sinagoga y fue invitado a leer en voz alta un pasaje de las escrituras. “se le dio el libro del profeta Isaías y, habiendo abierto el libro,” (Lucas 4:16)   comenzó a leer estas palabras que hemos citado al comienzo de este mensaje
Cuando Jesús terminó de leer, “Enrollando el libro, lo dio al ministro y se sentó. Los ojos de todos en la sinagoga estaban fijos en él. Entonces comenzó a decirles: –Hoy se ha cumplido esta escritura delante de vosotros.” (Lucas 4:20-21)     Este relato bíblico que he leído muchas veces,  en esta ocasión me impacto sobremanera. Y me impacto porque expresa de manera inequívoca el hecho de que Jesús conocía el plan divino y la misión que Dios le había encomendado.

La mayoría de nosotros venimos a este mundo sin idea de lo que vamos a ser ni a hacer, esta es la realidad para la mayoría de los seres humanos.  Y a medida que escribo estas líneas viene a mi mente la imagen de los bebes cuando despiertan y comienzan a conocer el mundo que les rodea. Los vemos con esos ojos grandes abiertos mirando a todas partes como si estuvieran buscando algo.  Indagando aquí y allí, totalmente entregados a esa búsqueda en el reino de la acción externa. Y así somos la mayoría de nosotros. Indagando y buscando información allá afuera y reaccionando a todo lo que nos rodea y nos presenta el mundo.
Pero Jesús en la sinagoga dijo: «El Espíritu del Señor está sobre mí…» y claramente al leer las palabras del profeta Isaías, las hizo suyas; y te preguntarás ¿por qué?  Pues bien, Jesús obtuvo el bautismo de agua en el Jordán, ahí Juan bautizó a Jesús siguiendo la voluntad del Padre. Entonces casi inmediatamente, ocurre un segundo evento de gran significación, Jesús recibe el bautismo el Espíritu Santo.
“Y Jesús, después que fue bautizado, subió enseguida del agua, y en este momento los cielos le fueron abiertos, y vio al Espíritu de Dios que descendía como paloma y se posaba sobre él.” (Mateo 3:16)  Este es el bautismo del Espíritu Santo en donde recibimos “el don más valioso de Dios [que] viene aquellos que buscan firmemente primero el reino de Dios y Su justicia” (LPR p.25) y Cristo se hace cargo de nuestras vidas.
Cuando Jesús leyó las palabras del profeta Isaías, se apropió de ellas, las hizo Suyas y las expresó con poder. Y así estamos llamados tú y yo a expresar con poder el Cristo que renace en cada uno de nosotros.   Todavía nos queda mucho por transitar en este camino de la vida. Hay quienes miran a todas partes, y quienes se pierden en el laberinto de la vida tal vez buscándose a sí mismos. Esto es una experiencia triste.
Tomen por ejemplo, esa fecha que se acerca del 21 de diciembre del 2012 donde muchos auguran el fin del mundo. No sabemos a ciencia cierta qué va a pasar hasta que llegue el día.  Pero es impresionante la cantidad de material que se ha publicado en torno a esta fecha. Todos tienen algo que decir en torno a este día en donde se augura el fin del mundo y otros el comienzo de una nueva era.  Permítanme decirles a título personal lo que yo opino con relación a este supuesto evento que se aproxima independientemente de lo que pueda o no ocurrir en el reino natural.
Pienso que si va a ocurrir algún cambio, va a ser un cambio en la consciencia de la raza.  Así como Jesús dijo en la sinagoga: –Hoy se ha cumplido esta escritura delante de vosotros; Jesús comenzó una evolución en la consciencia colectiva de aquella raza de tal magnitud que se extiende hasta hoy a tal punto que se habla de un antes y un después del nacimiento de Jesús, el Cristo.  Jesús finalizó una era de separación en consciencia y  comenzó lo era del Cristo, la era del Cristo morador. Un solo hombre, el hijo  de María y José, dio origen a toda una nueva era en el pensamiento y en la consciencia colectiva de la raza humana.
Yo pienso que el mundo no va a terminar. Lo que podría terminar puede ser una etapa en la evolución de la consciencia colectiva de la raza.  Y como todo proceso es evolutivo, todos nos moveremos a un nivel de consciencia superior. Esta misma comunidad espiritual, el Centro de Cristianismo Práctico, tiene la oportunidad de transformar su propia consciencia colectiva si nos unimos para este propósito.  Esto lo podemos lograr por medio de la oración, la meditación y el silencio. Actualmente, mi esposa y yo tomamos todas las peticiones de oración que ustedes nos traen y oramos con cada uno de ustedes por treinta días y luego las enviamos a Silent Unity para que sigan orando treinta días más.
Tenemos reportes de los resultados positivos que nuestras oraciones han traído a muchos de ustedes, familiares y amigos. Resultados, todos positivos. Y esto son solo dos personas.  ¿Se imaginan ustedes lo que este Centro puede lograr si todos nosotros nos uniéramos en oración por una causa común?  Este Centro muy bien se puede convertir en un catalizador para el bien de todos sus constituyentes y para nuestra comunidad inmediata si todos nos uniéramos en oración visualizando solo el bien manifestándose a través de nuestros corazones.
Te invito aquí y ahora a que te unas a una cadena de oración que vamos a comenzar en esta comunidad hoy mismo. A las 9:00PM todos los días por los próximos 30 días visualiza a esta comunidad espiritual, creciendo en congregantes y prosperando en todas sus actividades; en ofrendas, en actividades, en nuevos y mejores servicios, en nuevos métodos creativos de llevar el mensaje a un número cada vez mayor de personas. Visualiza nuestra estación de radio alcanzando un número cada vez mayor de radio- oyentes.
Visualiza a los miembros de esta congregación envueltos en luz y en amor, sanos, puros y perfectos. Y en 30 días podemos tomar un tiempo para reportar los resultados de este proyecto.  No pienso que va a haber una destrucción total del mundo como  muchos han pronosticado. Todo lo contrario, pienso que va a venir un cambio y una evolución de la consciencia de la raza a un nivel mayor y superior, que va a venir un periodo en donde nos vamos a purificar aun más y todos tendremos parte en este proceso.  Y en este sentido el mundo está predestinado, no hacia la destrucción sino hacia el renacimiento de la consciencia de Cristo en cada uno de nosotros y en toda la raza humana. 
Y en este sentido todos estamos predestinados a expresar el Cristo morador en cada uno de nosotros con mayor poder. Y este momento se acerca cada día más.  Y así como el Maestro Jesús dijo: “–Hoy se ha cumplido esta escritura delante de vosotros”  tú y yo podremos decir, hoy se ha cumplido la profecía del fin del mundo tal y como lo conocemos.  ¿Por qué? Porque nuevo mundo ha nacido, un mundo donde hay paz, un mundo donde hay más amor; no porque haya venido más amor de un planeta X o Y sino porque cada uno de nosotros hemos decidido darnos a la tarea de expresar más amor los unos con los otros.
¿Puedes imaginar la posibilidad de un mundo en donde no haya hambre, ni guerras, ni engaños, ni mentiras, ni maltratos, ni criminalidad, un mundo en donde todos cooperemos por el bien común, un mundo donde no haya fronteras territoriales y haya prosperidad para todos?  Podrías pensar y decir que todo esto es una utopía, que no es práctico ni real. Pero lo que puedas pensar, sentir, y decir depende de ti y de mí; así como nuestras acciones dependen de cada uno de nosotros.  Y como todo proceso de cambio siempre tiene un comienzo, a ti y a mí nos toca dar el primer paso. Jesús comenzó el ministerio del Cristo, y te toca a ti y a mí culminar dicho ministerio. Jesús comenzó trayendo las buenas nuevas, te toca a ti y a mí continuar dando las buenas nuevas.
Jesús trajo esperanza a los pobres, y a ti y a mí nos toca avivar el centro del amor en los más necesitados, para que puedan atraer a sí mismos todo lo que les pertenece y necesitan para ser felices y estar satisfechos.  El Cristo en Jesús dijo: el que en mí cree, las obras que yo hago, él también las hará; y aun mayores hará. “(Juan 4:12)  Por esta promesa tú y yo podremos sanar a los quebrantados de corazón, pregonar libertad a los cautivos y dar vista a los ciegos, poner en libertad a los oprimidos y predicar el año agradable del Señor, por medio del poder del Cristo que mora en cada uno de nosotros.  Hoy te traigo Buenas Nuevas de gran gozo: ¿Puedes imaginar lo que todos nosotros juntos podemos hacer para contribuir a un mundo mejor? Te invito a que comencemos todos juntos este proceso de transformación.
La invitación está hecha; por mi parte te puedo decir que Ruth y yo vamos a estar orando los próximos 30 días por el bienestar general y espiritual de toda esta comunidad espiritual. Te invito aquí y ahora para que te unas y comencemos una nueva era en la evolución espiritual de nuestra comunidad y también de todas las comunidades circundantes. 
Dios te bendice  si sabiendo estas cosas las haces. ¡Amén!  

No hay comentarios:

Publicar un comentario